Jorge “Niño de Oro” Linares está satisfecho de la presentación que realizó recientemente ante Jesús “Matador” Chávez, en Tokio. En un encuentro con los medios venezolanos, el púgil aseguró que va a insistir en su meta de cinco títulos, en recuperar el boxeo en Venezuela, y además, comenzar a dar un apoyo más contundente para el desarrollo de jóvenes promesas. Sin embargo, la meta máxima es “recuperar mi título mundial, quiero recuperar mi título mundial. Ganar el tercero en mi carrera y perfilarme hacia la otra gran meta, cinco títulos mundiales. Un sueño que tengo”.

“Tenemos muchas ideas y proyectos, que todavía no se han planteado completamente sino que se manejan como ideas. Tenemos pensado ayudar a dos muchachos que están en el amateur, quizás llevarlos a Japón, sea para que comiencen en el profesional o para que  se mantengan en el aficionado”, detallaba el barinés.

Resaltó que le satisface el proyecto de desarrollar el boxeo femenino, y “eso quiere decir que debemos tener cuidado con ellas”, dijo entre risas, y luego felicitó a los ganadores del torneo Batalla de Carabobo, y especialmente a las fichas de la Asociación de Distrito Capital, quienes se acercaron al Comité Olímpico Venezolano a saludarlo.

De su pelea con “Matador” dijo que estuvo bien, “me sentí tranquilo, Salí cómodo, con mucha paciencia. Más decidido, fuerte y me gustó el trabajo que hicimos. Creo que el resultado fue bueno en líneas generales. No sé si realmente se lesionó o qué, pero lo importante es que no continúo porque pudo haber terminado con un nocaut feo, fulminante. El no veía por el ojo izquierdo desde el segundo round”.

De planes y futuro inmediato, Linares dijo que todavía no hay nada claro, “tenemos pensado descansar un mes, y en ese tiempo ver lo que vamos a hacer. Estaremos este mes en la Convención de la AMB, en Nicaragua, y unos días en Panamá”.

Calcula que para inicios de diciembre estaría en los Estados Unidos “porque los planes que están haciendo ahorita el señor (Akihiko) Honda y Golden Boy Promotion es definir todo, porque los planes es irme a Los Ángeles y quedarme allá entrenando”, disparó el ex campeón mundial.

“Quiero irme para allá, primero por el cambio, el aprendizaje de otra cultura, muchas cosas, pero también por otra técnica, mejorar, perfeccionar muchas cosas. También está que ya en Japón es muy difícil tener sparring, primero por el peso, segundo porque es complicado que algún venezolano o mexicano acepte irse un mes allá a entrenar y dejar su carrera de lado por ayudar. Es más fácil conseguir los sparring en Estado Unidos”, dijo firmemente.

No tiene definido si se quedaría definitivamente en territorio estadounidense, pero lo que sí tiene claro son los planes. Para el 2011 estima que tendrá cuatro peleas, “eso es lo ideal. Vamos a esperar por el ganador de la pelea entre (Humberto) “La Zorrita” Soto con Urbano Antillón, y ahí estaría el chance mundial con el CMB. Aunque se ha hablado mucho de pelear antes con Likar Ramos, y también de Juan Díaz, pero todavía no se sabe quién será el próximo rival”.

Le restó importancia a la posibilidad de medirse a Miguel “Aguacerito” Acosta, campeón ligero de la AMB, “lo mismo decían cuando estaba Edwin Valero, no quiero pelear con un hermano, con un venezolano, si se tiene que dar se dará pero no es algo que desee y vaya a pedir yo”.

Afirmó que por lo pronto estará tratando de arreglar las cosas, “con la intención de concretar los planes que hay. Quiero ser un modelo para la juventud, de llevarles el mensaje de hacer deportes, de mantenerse sin vicios. Quiero ayudar a recuperar el boxeo en el país, y del deporte en general, además de recuperar el gimnasio de boxeo de Turmero de la AMB”.

Reiteró que existe talento de sobra en Venezuela “me quedo loco la cantidad de talentos que tenemos, en todas las categorías, de todos los niveles y pesos, eso es impresionante y no se puede perder, hay que ayudarlos”.

Recalcó que no descarta el venirse a Venezuela “pero para eso hay que reunir una serie de condiciones, entre ellas un buen gimnasio para trabajar, y por eso mismo estamos pensando en conseguir apoyo del Gobierno, de la Empresa Privada, y evidentemente yo pondré de mi parte porque tengo el contacto y la posibilidad. Es porque lo quiero hacer, porque a la hora de la verdad no sólo me ayudaría a mí, sino a todos los jóvenes del país”.

Cree que le quedan unos diez años más en el boxeo, “me sentí bien, tranquilo y fuerte. Los planes es mantenerme así y quien quita si unos diez años más hasta los 35”, puntualizó.

Admitió que le interesaría incursionar en el mundo de la preparación física, sería entrenador o manejador, “son alternativas que me he planteado y me pregunto, ¿por qué no?”.