Este viernes falleció una de las grandes leyendas del boxeo mundial, el cubano-mexicano José “Mantequilla” Nápoles. El ex campeón de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) se marchó a los 79 años de edad en Ciudad de México, donde residía.
Nacido en 1940 en Santiago de Cuba, Nápoles adoptó a México también como su casa. El antillano se convirtió en campeón por primera vez en 1969, cuando venció a Curtis Cokes para capturar la faja de peso welter de la AMB.
Nápoles tuvo que salir de Cuba cuando el boxeo profesional fue prohibido en la isla por Fidel Castro tras su llegada en 1959. Esa fue la razón que lo llevó a México, a donde llevó lo mejor del estilo cubano y lo combinó con lo que pudo aprender en su país receptor.
Cuando el pugilismo rentado fue prohibido en Cuba, ya Nápoles contaba con ocho combates y gracias a su decisión no vio truncada su carrera.
El cubano impresionó al mundo con 15 defensas de su faja welter para ser uno de los monarcas más dominantes del peso. Muchos aficionados recuerdan la pelea que perdió contra Carlos Monzón en 1974, a la cual llegó con desventaja en el peso para disputar las fajas de la categoría de los medianos y perdió por retirada en el sexto asalto.
Sin embargo, ese revés no empaña la gran carrera de Nápoles, quien mantuvo sus cinturones de las 147 libras después de recibir un permiso para subir a la siguiente división.
Se retiró en 1975 con un récord de 81 ganadas, 7 perdidas y 54 nocauts. Un boxeador digno de recordar y una gloria del deporte que se va a extrañar. Vuela alto, “Mantequilla”, gracias por darle tanto al boxeo.