La T-Mobile Arena de Las Vegas, Nevada fue el escenario donde Badou Jack (22-1-2, 13KO), destrozó a Nathan Cleverly (30-4, 16KO) en cinco asaltos, para arrebatarle el título mundial Semipesado de la Asociación Mundial Boxeo (AMB).

Jack ganó el título de la AMB de manera magistral y haciendo uso de sus habilidades, mismas que lo hicieron lucir como todo un cazador que siempre va hacia adelante, buscando a su víctima.

Su rival de turno no pudo revertir el ataque del llamado “The Ripper” y comenzó a sentirse frustrado. Sólo fue cuestión de tiempo para que Jack aumentara la presión y sacara el resultado, hilando combinaciones fatales a la humanidad del británico.

Terminada la pelea y con la sangre controlada, Cleverly dijo: “Jack fue muy fuerte. Me atrapó y me rompió la nariz en la tercera vuelta, de ahí en adelante todo fue malo. Me hirió y traté de protegerme, pero esto es parte del deporte».

A pesar de estar en desventaja desde el inicio de la pelea, Cleverly no estuvo de acuerdo con la acción del árbitro Tony Weeks, quien a su juicio fue muy prematuro al detener el combate, pero al final aseguró que respetaba su decisión.

Los demás, sin duda, estuvieron de acuerdo con la detención, al ver la superioridad de Jack, quien tuvo una noche fácil, mientras que su rival estaba bañado en sangre.

El ahora doble campeón agregó: “Muchos dudaron de mi, mi entrenador y mi equipo hicieron un gran trabajo para llegar a este nivel. Es un sueño hecho realidad porque mi entrenador fue campeón AMB y gracias a él ahora lo soy también”.

Remontándonos a las palabras Jack, hay que recordar que su entrenador, el ex-boxeador Lou Del Valle,  ganó el título mundial de Semipesado de la AMB en 1997, y su anterior entrenador Eddie Mustafa Muhammad también reinó en esa división entre los años 1980 y 1981.

Sobre su futuro inmediato, Jack dijo que quiere pelear contra Adonis Stevenson y no dudó en mandarle un mensaje: “Hagamos la pelea, al menos que quieras una trilogía con Andrzej Fonfara, pelea con alguien de verdad, yo estoy dispuesto a pelear donde sea”.

Cerrando el espacio de declaraciones, Nathan Cleverly manifestó: «Tengo mucha experiencia de mi lado. Soy dos veces campeón del mundo y me regreso a casa con la alegría de ser parte de la historia, a pesar del resultado, ya que en el boxeo todo puede pasar y en esta ocasión me tocó perder.