Dmitry Bivol logró una victoria muy trabajada y cerrada sobre Artur Beterbiev por decisión mayoritaria (114-114, 116-112, 115-113) para recuperar su título de Súper Campeón de la  World Boxing Association (WBA)  y obtener las fajas del WBC, la WBO y la IBF. 

El nacido en Kirguistán y de nacionalidad rusa ahora es el flamante campeón indiscutido de las 175 libras y logró quitarle el invicto al temible Beterbiev, quien ya se lo había quitado a él en octubre del año pasado. 

Desde el primer asalto, Bivol mostró una estrategia impecable, utilizando su velocidad y precisión para mantener a Beterbiev a raya. A pesar de la agresividad y el poder de golpeo de Beterbiev, Bivol supo manejar la distancia y contrarrestar con golpes certeros. 

En el tercer asalto Beterbiev aumentó la presión y logró conectar varios golpes al cuerpo de Bivol. Sin embargo, el ruso se mantuvo firme y respondió con combinaciones rápidas. En quinto round nuevamente el canadiense golpeó de forma potente e hizo retroceder a Bivol. 

Le velocidad de Bivol le permitió dominar la pelea en varios asaltos, pero la contundencia de Beterbiev hacia que el nuevo campeón se sacudiera. 

Al cierre del combate los intercambios de golpes favorecieron a Beterbiev que con su volumen de golpeo pudo llevarse el combate. 

La pelea fue una demostración de técnica y resistencia por parte de ambos boxeadores. Bivol expresó su satisfacción tras la pelea: «Me empujé a mejorar para esta pelea» comentó sobre el ring el campeón tras la victoria. 

Con este triunfo, Bivol no solo vengó su derrota anterior, sino que también consolidó su posición como uno de los mejores boxeadores de la actualidad. Con esta victoria del ruso, se abre la puerta para una tercera parte de esta rivalidad que es una de las mejores de la naciente década.