El escocés Ricky Burns y el bielorruso Kiryll Relikh se vieron las caras, este miércoles, en la conferencia de prensa realizada en Glasgow, Escocia, previo al careo de este viernes por el título superligero de la Asociación Mundial de Boxeo.
Durante la reunión con los medios prevaleció el respeto mutuo. No obstante, ambos gladiadores apostaron por su victoria.
“Me alegra estar aquí y deseo llegue el día de la pelea. Estoy dispuesto a luchar por el cinturón y creo tener la edad adecuada para ganarlo. Sé que soy un boxeador desconocido y que el público apoyará a Ricky, pero no importa, estoy listo para ganar el título”, afirmó Relikh retador a la corona.
Entre tanto, Burns fue más cauteloso en sus declaraciones. “Sabemos que esta pelea es dura y nos hemos preparado para 12 asaltos. Sé que no puedo quedarme en las cuerdas, pues mi meta es defender mi cinturón” y agregó: “las personas han estado hablando sobre un posible combate ante Adrien Broner, pero yo estoy enfocado exclusivamente en Kiryll no puedo permitirme distracciones”.
Por su parte, Eddie Hearns afirmó que espera que el viernes sea una gran noche de boxeo y dio a conocer que todos los boletos para la velada están agostados.
Burns, quien ganó su título el pasado mes de mayo y que lo expondrá por primera vez en par de días, tiene récord de 40 victorias, 5 derrotas, un empate y 14 nocauts. Mientras que Relikh, quien se estrenará en un careo mundialista, tiene una hoja de vida de inmaculada de 21 careos ganados, 19 de ellos por la vía del cloroformo.