Carlos Cañizales (16G-0P, 13KO) tendrá la oportunidad que ha esperado por tanto tiempo. El venezolano peleará por el título minimosca de la Asociación Mundial de Boxeo contra el japonés Ryoichi Taguchi (25G-2P-1E, 11KO) el 31 de diciembre.
El caraqueño tendrá que viajar a Tokio para tratar de quitarle el cinto al campeón mundial, en el gimnasio Ota-City General, y desde ya inició su trabajo para llegar en las mejores condiciones posibles al importante careo.
«Estoy muy mentalizado y lo más importante es que tengo que hacerle mucho caso a mi entrenador tanto en los entrenamientos como en la misma pelea. Estoy metido de lleno en el gimnasio y trabajando fuerte porque esta es una gran oportunidad», sentenció el boxeador de 23 años, que trabaja en la Parroquia Antímano, de Caracas.
El actual campeón Fedelatin de la categoría aseguró que ha visto varios videos de Taguchi y que ha estudiado al monarca: «Es un gran pugilista y le tengo respeto, pero tengo hambre y quiero hacer las cosas bien. Yo soy un boxeador rápido y creo que la velocidad será mi mejor arma para él, así que vamos a hacer una pelea inteligente y a intentar que la rapidez que tengo se imponga sobre el ring».
«Tengo que mejorar la condición física. En la pelea donde gané el título Fedelatin fui hasta la decisión y por momentos me sentí cansado. Son cosas en las que estoy trabajando y eso ya quedó atrás, ahora tengo más experiencia y mucho más aguante», prosiguió.
Por último, el pupilo de Nicolás Hernández agradeció a la AMB por el chance titular contra Taguchi: «Doy gracias a la AMB por esta gran oportunidad. Este organismo me ha dado muchos chances y este es uno más que no quiero desaprovechar».