La Arena del MGM Grand de Las Vegas fue el escenario para que el campeón superligero de la Asociación Mundial de Boxeo Danny García venciera al argentino Lucas Mathysee y retuviera su título además de mantener su invicto tras 27 peleas.
García superó al sureño en todos los tramos del combate, mostró efectividad en sus combinaciones y lastimó el ojo derecho de Mathysee desde temprano.
Las tarjetas le favorecieron 115-111, 114-112 y 114-112.
El combate fue quizás el más emocionante de la noche, y puso al público como una pieza más del mismo al provocar durante los 12 asaltos que los presentes aplaudieran, brincaran y celebraran cada una de las incidencias en el ensogado.
Tras la pelea, Mathysee admitió: “es un gran campeón y agradezco la oportunidad que me dio por el título”, y también dijo que a pesar de haber pasado casi la mitad de la pelea con su ojo cerrado “hice un gran combate”.
Mientras tanto el campeón dijo que el plan de trabajo planteado era exactamente el que se realizó “él nunca había enfrentado adversidad, nunca había sido lastimado, y ese era mi plan. Cerrarle el ojo y castigarlo”.
Luego comentó «la única manera de frenarlo era ir al cuerpo. Sabía que tenía 12 asaltos para trabajarlo, no quería quemar todos los cartuchos en los seis primeros asaltos».