La Asociación Mundial de Boxeo (AMB), que nació oficialmente en 1921 bajo el nombre de National Boxing Association (NBA), llegó en un momento difícil para el boxeo y contribuyó a su rescate y transformación en beneficio de la disciplina.
Los años previos a la institución del organismo pionero estuvieron marcados por diferentes hechos que tenían al boxeo contra la pared y a su actividad comprometida. La Primera Guerra Mundial (1914-1918) y la “Gripe Española” fueron dos hechos que frenaron al boxeo y no le permitieron tener la misma actividad de años anteriores.
En un escrito de Joe Koizumi publicado el 2 de mayo de 2020, el investigador habló sobre cómo esa pandemia que se extendió desde 1918 hasta 1920 afectó al mundo del pugilismo. El japonés detalló cómo 500 millones de personas de infectaron y unos 50 millones murieron.
Una descripción de la pandemia con respecto al boxeo fue publicada en las páginas del New York Times el 13 de octubre de 1918: “El boxeo en el Este está ahora paralizado, debido a la epidemia de la gripe española. Los promotores de Filadelfia, Boston y Nueva Jersey, en cumplimiento de las solicitudes emitidas por sus diferentes Departamentos de Salud, han acordado el cierre de operaciones. Queda por ver cuánto tiempo estará inactivo el deporte, pero es positivo que no se realicen combates de ninguna importancia mientras la epidemia continúe”.
Todo esto habla de la situación que se vivía en esos tiempos previos al nacimiento de la AMB, pero la llegada del organismo pionero fue un nuevo inicio y una forma de reinventar el boxeo, reconocer de una forma más acertada a los campeonatos mundiales e iniciar una nueva era cuyos cimientos se mantienen al día de hoy en medio del año centenario del primer organismo en regir el boxeo.