Desde 1983, por decreto, los estadounidenses celebran el Día de Martin Luther King en homenaje al nacimiento a quien fuera un luchador por los derechos humanos y civiles de los ciudadanos.
Premio Nobel de la Paz en 1964, y el monarca de los pesos pesados Muhammad Ali se convirtieron en grandes amigos basándose en el odio común que sentían de parte de otros, de manera injustificada por su color de piel y creencia religiosa.
Ambos lucharon, desde su escenario y bajo su perspectiva, para sobreponerse a las adversidades, por lo que formaron parte de la lucha por las libertades para los hombres de color.
Esa amistad, según los archivos del FBI, tomó fuerza después que Ali se negara a prestar servicio en la Guerra de Vietnam en 1967.
Su amistad perduró hasta el asesinato de Martin Luther King el 4 de abril de 1968.