George Kambosos prometió algo a lo que pocos de los especialistas del boxeo dieron crédito y era quedarse con el Súper Campeonato ligero de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), además de las fajas de la FIB, la OMB y el CMB que tenía en su poder Teófimo López.
El Madison Square Garden, de Nueva York, ardió el sábado en la noche y el australiano cumplió su promesa ante la mirada incrédula de muchos de los espectadores. 115-111, 113-114 y 115-112 fueron las tarjetas que lo acreditaron como el nuevo monarca de las 135 libras y le permitieron pasar a la élite del boxeo mundial.
Kambosos no inició con la mayor confianza y en el primer asalto estaba intentando descifrar a un Teófimo que salió agresivo y dispuesto a retener sus coronas. Sin embargo, una derecha en recto envió a López a la lona y fue una forma de hacer entender a Kambosos que tenia lo suficiente para ganar.
Eso se notó en el cambio de actitud que tuvo en los rounds siguientes, en los que no tuvo miedo de entrar al intercambio. Kambosos estuvo sacando la mejor parte cuando se batía de tú a tú con López y eso lo ayudó a ganar una gran cantidad de asaltos en el combate.
También demostró de lo que estaba hecho en el décimo round cuando una combinación de Teófimo envió a la lona al de Australia. A pesar de que López fue con todo a intentar rematarlo, Kambosos pudo recuperarse y sobrevivir al mal momento para ganar los últimos dos asaltos de la pelea y asegurar la decisión dividida.
El peleador de 28 años sigue invicto en 20 peleas, 10 de ellas ganadas por nocaut, mientras que Teófimo perdió por primera vez en su carrera y tiene balance de 16-1.