Naturalmente atenuados por el paso de los días los abundantes y polémicos comentarios por el igualmente controversial veredicto de la pelea por las coronas supermosca AMB y CMB, fallo que resultó favorable al mexicano Juan Francisco “El Gallo” Estrada sobre el nicaragüense Román “Chocolatito” González, la afición mundial del boxeo empieza desde ahora a tejer conjeturas respecto a lo que podría ocurrir en una tercera confrontación entre ambos y que romperá la paridad 1-1 registrada en sus respectivos récords.
De acuerdo con lo que se dijo poco después de terminar la ardorosa refriega (candidata desde ya a “Pelea del Año”) montada en el American Airlines Center de Dallas, Texas, dicha tercera batalla se llevaría a cabo a finales de este 2021, posiblemente en California. Fue, al menos, lo que deslizó frente a los medios de masa el británico Eddie Hearn, Director de la empresa promotora MatchRoom Boxing.
Estrada y González se midieron por primera vez hace 8 años y cuatro meses por el cetro minimosca AMB que ostentaba el centroamericano, tetracampeón mundial y sin duda alguna uno de los mejores púgiles de la actualidad universalmente, quien en aquella ocasión cargó con un estrecho triunfo a los puntos.
El combate del sábado 14 en Dallas se caracterizó por un intenso e inacabable intercambio de golpes lanzados, tantos, según el sistema computarizado de Compubox, que sumaron 2.529 de los cuales el a la postre vencedor disparó 1.212, de los que conectó 314 (26% de efectividad), contra 391 (30%) impactados por el de Managua. Esas estadísticas marcan un tope para la división de las 115 libras (52,163 kilogramos). Tales cifras, añadidas a las de su primera pelea totalizan 4.662 golpes lanzados por los dos, cantidad sencillamente impresionante, de asombro.
RUNGVISAI: LA PIEDRA EN EL CAMINO
Con su victoria el peleador de Puerto Peñasco, Sonora, que expuso su trono del CMB, colocó su registro de 13 años de actividad sobre el ring en 42 ganadas, 28 por KO, de las que ha perdido solo tres, una frente a González, como se dijo; otra por decisión contra el filipino Sor Rungvisai el 26/2/18, y de quien tomó desquite a los puntos el 26/1/19 y la otra vs su compatriota Juan Carlos Sánchez en las tarjetas en mayo de 2011 y al cual noqueó en 10 en la revancha en diciembre de aquel año. Por su parte, “Chocolatito” quedó en 50 ganadas, 41 por nocaut, con reveses frente a Wisaksil Wangek, mejor conocido como Srisaket Sor Rungvisai (2) el 18/3/17 a los puntos, la otra por KOT4 en septiembre del mismo año y, obvio, la sufrida hace unos días ante Estrada.
Con relación a ese encuentro reciente hemos leído numerosos artículos, que respetamos naturalmente, en que se le califica de “una de las mejores peleas de la historia”. Nosotros, con modestia, no llegamos a tales extremos. Fue, en verdad, una muy buena y muy dura confrontación, llena de emotividad, de acciones parejas y de dominio alterno. En nuestra puntuación personal sumamos un empate a 114 con 6 rounds ganados y 6 perdidos de lado y lado -con ciertas vacilaciones nuestras en uno que otro asalto, cerrados la mayoría, de difícil puntuación-, para unas tablas que habría sido una merecida recompensa al tenaz esfuerzo de los dos peleadores que, no tenemos duda, se respetaron y fueron por ello cautos. Pero en verdad nos luce (con perdón de quienes creen lo contrario) cuando menos exagerado lo de que fue “una de las mejores peleas de la historia”. Claro que los dos, reiteramos, ofrecieron un buen esfuerzo, batallaron arduamente en los 12 tramos. Pero, sostenemos, nunca pusieron toda la carne en el asador, como se dice en el toreo, y por supuesto que sí recompensaron debidamente a los aficionados que pagaron sus boletos, congregados en el local, y que fueron menos de los que pudieron haber asistido de no estar de por medio la pandemia.
Nada más que decir. Salvo volver al inicio de esta nota cuando apuntamos que, por lo pronto el mundo boxístico quedó a la espera del anuncio y concreción de la ya bautizada trilogía entre el Gallo que cantó en el AAC y el “Chocolatito” que, con el fallo, quedó como el agua puesta al fuego.
Una expectante trilogía aquella que, vale agregar, tiene una piedra en el camino con nombre propio: Srisaket Sor Rungvisai (50-5-1, 41 KO), quien los ha vencido a los dos y que es el potencial próximo contrincante de Estrada en una pelea mandatoria, esto es, obligada. Una gran piedra y un tenebroso fantasma en la ruta, que podría estropear la fiesta tanto al “Gallo” como al “Chocolatito”. Y a los aficionados.