El ex campeón del mundo, Jorge Linares, se estrenó como supervisor de combates con la World Boxing Association (WBA) este fin de semana durante el enfrentamiento entre Gilberto Ramírez y Arsen Goulamirian en Inglewood, California.
Si algo ha caracterizado al “Niño de Oro” durante su vida y su carrera es su capacidad multifacética y su adaptación a distintos roles tanto dentro como fuera del deporte. Tras su retiro oficial el año pasado, ha dado el salto como entrenador y, además, embajador del organismo pionero.
En esta ocasión fue designado como supervisor del combate por el título mundial crucero de la WBA, un rol para el que se ha ido capacitando y en el que cumplió con todos los pasos desde la semana previa hasta el día del combate de una manera satisfactoria.
Linares destacó haberse sentido cómodo en este desempeño y fue evidente su influencia tanto dentro como fuera del ring en cuando al trato con las autoridades locales, boxeadores y promotores este fin de semana.
Para la WBA es un orgullo que los protagonistas del deporte se sigan sumando a sus filas tras sus retiros como boxeadores activos. Linares ha sido su más reciente embajador y ahora ha hecho su primera supervisión. También tiene entre sus filas al ex peleador Juan “Baby Bull” Díaz, quien ha cumplido también con el rol de supervisor, además de Kina Malpartida, ex peleadora que ahora es la directora del comité de campeonatos femenino.
El organismo pionero seguirá trabajando en la integración de ex peleadores al mundo del boxeo, y seguirá capacitándolos para distintos roles ya que cuentan con mucha experiencia y conocimientos que aportar, además de servir como inspiración para quienes están activos.