El boxeo panameño, latinoamericano y mundial despertó la mañana de este viernes 11 de agosto con una triste noticia: Francisco ‘Tolete’ Arroyo, entrenador forjador de varios campeones mundiales partió de este mundo. Tenía 60 años.
Arroyo ingresó al mundo del boxeo como peleador en 1982. En las lides profesionales hizo 24 peleas llegando a ganar 15 (6 KO’s), perdiendo 8 y empatando 1. Combatió en países como Venezuela, Colombia, Reino Unido, Irlanda, Italia e Indonesia. Su mayor logró como atleta fue consagrarse como campeón intercontinental de peso gallo.
Tras su retiro en 1993, se dedicó a trabajar como entrenador siendo uno de los precursores de la última gran época gloriosa que ha tenido el boxeo panameño entre el 2005 y 2010. Por aquellos años como encargado principal de la parte técnica de la Cuadra ‘Los Rockeros’ del promotor Rogelio Espiño trabajó de cerca con los monarcas universales de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), Vicente ‘el Loco’ Mosquera, Celestino ‘Pelenchín’ Caballero, Ricardo ‘Maestrito’ Córdoba y Luis ‘el Nica’ Concepción.
También tuvo que ver en la formación y desarrollo de otros grandes campeones que ha tenido Panamá como Roberto ‘la Araña’ Vásquez y Anselmo ‘Chemito’ Moreno, además de los venezolanos Jorge ‘Niño de Oro’ Linares, Nehomar Cermeño y Jean Piero Pérez.
De poco hablar ante los medios, pero con un carácter jovial, Arroyo supo ganarse el cariño de todo el que trabajó con él. Fue además un gran amigo y aliado de la AMB participando siempre de los Festivales KO a las Drogas que se realizaron en suelo panameño y otros países de Latinoamérica.
Gilberto Jesús Mendoza, Presidente de la AMB lamentó el fallecimiento de Arroyo a quien consideró un amigo, además de gran motivador previo a los grandes combates de exhibición que en su momento hizo ante figuras como Félix ‘Tito’ Trinidad, Oscar De La Hoya y Evander Holyfield, entre otros.
“Tolete fue para mi un gran motivador y psicólogo de calle. Con sus famoso ‘sácale la x…’ me hizo enfrentar miedos frente a Trinidad, De La Hoya y Holyfield. Cada vez que me veía nervioso buscaba la forma de hacerme sentir ya estás en el ring.. ‘tú tienes hue… y vamos pa’ adelante’”, comentó Mendoza.
Según Mendoza, Arroyo siempre le decía que le gustaba cómo lanzaba su gancho y su upper de derecha.
“Él era un gran ser humano, jocoso, pero respetuoso, trabajador y soñador. Fue clave y la bujía en una buena época para el boxeo panameño”, recalcó Mendoza.
Así como Mendoza los describe, tal cual era Arroyo. Sin duda una de las figuras más carismáticas que ha tenido el boxeo criollo en los últimos años y que este viernes perdió su última pelea contra un cáncer contra el que estuvo batallando durante meses. Paz a su alma!!!
