Medellín tendrá el honor de recibir al «Golden Boy», Oscar De La Hoya, durante el marco de la Convención de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB), que se celebrará entre el 30 de octubre y el 2 de noviembre en la ciudad. La leyenda del boxeo dirá presente en el esperado evento y participará de lleno en las actividades programadas por el ente.
El estadounidense de ascendencia mexicana fue uno de los boxeadores más destacados desde finales de la década de los 90 hasta el inicio del nuevo milenio. Desde que ganó su medalla de oro en los Juegos Olímpicos de Barcelona 1992, ya se sabía que el mundo estaba ante uno de los talentos más impresionantes que este deporte hubiese visto jamás. Ese mismo año dio el salto al profesional y tras realizar 12 combates en el lapso de dos años, consiguió su primer título mundial en 1994 con una victoria ante Jimmi Bredahl en el peso súper pluma.
Ese fue el inicio de la grandeza para De La Hoya. Su exitosa carrera lo llevó a ganar campeonatos mundiales en seis categorías hasta el peso mediano, en un trayecto que lo puso cara a cara con los mejores boxeadores de la época. El «Niño de Oro» enfrentó a leyendas como Julio César Chávez, Félix Trinidad, Shane Mosley, Arturo Gatti, Bernard Hopkins, Fernando Vargas, Floyd Mayweather Jr. entre otros grandes.
Entre victorias y reveses, De La Hoya se erigió como una referencia del pugilismo y después de retirarse en 2008, dejó un palmarés envidiable en el ámbito profesional. Pero su excelencia deportiva no es la cualidad exclusiva del púgil, pues fue más allá y se convirtió en uno de los promotores más exitosos y trabajadores del boxeo, conducta cónsona con los valores de la AMB y lo que ha hecho que, espontáneamente, el organismo y De La Hoya trabajen de la mano.
Oscar ha impulsado el talento de boxeadores jóvenes y ha sido parte directa en la organización de varias de las mejores peleas de los últimos años, muchas de ellas con cinturones AMB involucrados. Su presencia en la Convención servirá de mucho tanto para el boxeo, como para la ciudad y los proyectos del ente en el futuro inmediato y a largo plazo. Colombia y la AMB lo esperan con las puertas abiertas.