A menos de dos semanas para calzarse los guantes en el MGM Grand Arena de Las Vegas, Nevada, el 19 de enero, los pesos welters Manny Pacquiao y Adrien Broner, ofrecieron el llamado entrenamiento ante la prensa en Los Ángeles, como un adelanto de lo que ofrecerán el día de la verdad.

El llamado “Pac-Man” volverá a pelear en suelo estadounidense a dos años de su última presentación cuando superó al mexico-americano Jessie Vargas en el Thomas and Mack Center de la famosa conocida “Ciudad del Pecado”.

Broner tendrá la oportunidad de escribir su nombre en letras doradas de superar a la leyenda Manny Pacquiao y el chance de borrar los resultados adversos que obtuvo ante Marcos “El Chino” Maidana, Shawn Porter y Mikey García.

En primera instancia se esperaba el entrenamiento de ambos boxeadores en el mismo recinto, pero al final Pacquiao entrenó en el Wild Card Gym y Broner en el Tengoose Boxing Gym.

Ambos púgiles se enfocaron más en atender a la prensa que en realizar la rutina entrenamiento de costumbre, a excepción del filipino que hizo soltura y algunos minutos de manoplas.

El primero en dar sus declaraciones fue el campeón, esto fue lo que dijo Manny: “En este momento no hay espacio en mi mente para pensar en Floyd Mayweather, estoy totalmente enfocado en mi combate contra Broner”.

Sobre el regreso de Freddie Roach a su esquina expresó lo siguiente: “Hemos realizado un gran campamento, estoy contento por el trabajo realizado y la unión del equipo”.

Sobre su regreso a Estados Unidos, Pacquiao manifestó: “Estoy agradecido con el apoyo de la gente, ellos me inspiran y seguiré aquí hasta cuando el cuerpo me lo permita. Tengo 40 años, pero todavía puedo estar en lo más alto”.

El segundo en conversar con la prensa fue “El Problema” Broner, quien no hizo trabajo físico alguno, pero si resolvió todas las interrogantes de los medios.

“Esta pelea con Pacquiao se la voy a dedicar a mi gente, al barrio y a todos los que sí creen en mí. El es una leyenda, pero yo tengo juventud, boxeo y la pegada para ganar”, expresó el orgullo de Ohio.

“Es el combate más importante de mi vida, estoy enfocado y en inmejorables condiciones. Puedo decirle a los fanáticos filipinos que luego de esa noche serán mis seguidores”, agregó el retador.

“La pegada de Pacquiao es buena, pero yo tengo velocidad y buena estamina, será un gran pague por ver; invito a todos a que no se lo pierdan”, culminó Broner.

Este compromiso promete ser el primer mega combate del 2019, será la primera defensa del título wélter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB) que Pacquiao le arrebató en julio pasado al argentino Lucas Matthysse.