Como parte de la promoción del combate del 19 de enero en el MGM Grand de Las Vegas, el filipino Manny «Pac-Man» Pacquiao y el estadounidense Adrien “El Problema” Broner hicieron una segunda parada en Los Ángeles este martes, un día después de que oficializaran el duelo en Nueva York.
El Waldorf Astoria de Beverly Hills fue el escenario donde el senador y el controvertido peleador sostuvieron el segundo intercambio de palabras, para luego cada uno hacer sus respectivos campamentos de entrenamiento de cara su compromiso por el título mundial wélter de la Asociación Mundial de Boxeo (AMB).
Una de las novedades es que Pacquiao se acompañará de su otrora entrenador por años, estamos hablando de Freddie Roach, a pesar de que este se encuentra afectado de salud, pero el filipino lo quiere para que supervise el entrenamiento junto al equipo entero. Muy humilde como es, el ocho veces campeón del mundo trató con respeto a Broner, lo reconoció como un rival de nivel y expresó que espera vencerlo.
“Regresé al boxeo porque es mi vida, no puedo vivir sin hacer lo que me gusta. Con los guantes represento y motivo a todos los filipinos”, dijo el senador.
“Prometo una gran pelea a los fanáticos, mi rival es de cuidado y uno de los mejores, pero voy a buscar una gran victoria para demostrar que todavía tengo boxeo para estar al más alto nivel”, agregó el filipino.
Por su parte, Broner, que se ha topado con la realidad de que Pacquiao desde ya está hablando de su segundo pleito con Floyd Mayweather, nombrada como la «Pelea del Siglo» en su primera edición, y por eso aseguró que romperá todos los planes con un triunfo sobre el astro filipino y futuro salón de la fama.
“Están haciendo planes sin antes haberme vencido. Se que Pacquiao es una leyenda, por ello me enfocaré más que nunca”, dijo el llamado “Problema”.
“No quiero dejar pasar la oportunidad de hacer historia, no puedo dar detalles de mi campamento, pero esa noche verán lo que traigo”, expresó el retador.