La leyenda del boxeo filipino Manny Pacquiao salió inspirado en su cita con el argentino Lucas Matthysse luego de un año de subir al ring, pues luego de mandarle a la lona en tres ocasiones, logró la victoria por nocaut técnico a los 2:43 del séptimo capítulo para convertirse en el nuevo campeón Welter de la Asociación Mundial de Boxeo.
Pacquiao mandó a la lona a Matthysse en el tercero, quinto y séptimo episodios, provocó la desesperación total en el argentino y al final, cuando ya lo tenía dominado tanto mental como técnicamente, se animó con todo para conseguir la anhelada faja de las 147 libras.
En la contienda, realizada ante un lleno en la Axiata Arena de Kuala Lumpur, Malasia, Pacquiao demostró que a sus 39 años puede ser un peligro para cualquiera, y seguramente se abrirán nuevas opciones en su futuro dentro del boxeo profesional.
El timing, la fortaleza y sobre todo la velocidad de Manny fueron vitales en la batalla ante el noqueador Matthysse, que nunca se asentó en el ring y terminó pagando el precio de sus descuidos hasta que ya no pudo más, obligando al tercero en el ring, Kenny Bayless, a detener la contienda.
Con esta victoria, Pacquiao ganó su pelea número 23 de campeonato mundial en su carrera y por primera vez conquista la faja de la AMB, el organismo pionero, después de haber fallado ante Juan Manuel Márquez en peso Pluma en el sensacional empate que protagonizaron en 2004 y ante Floyd Mayweather en peso Welter en 2015.
Pacquiao mejoró su récord profesional a 60-7-2 con 39 nocauts por 39-5 y 36 nocauts del argentino, que dejó en entredicho su permanencia dentro del deporte de los puños.