La preparación a los Juegos Olímpicos de Tokio está latente y forma parte de la motivación de millones de atletas durante tiempos difíciles como los de la pandemia. La Asociación Mundial de Boxeo se haya en seguimiento de todos los púgiles que han clasificado como los que transitan el camino para llegar. El compromiso está en continuar con el apoyo tal como se realizó en febrero del corriente año con el campamento WBA Future Champions.
Hace pocos días la boxeadora pionera en India, Mary Kom, hizo público el gran entusiasmo que siente por llegar a la fecha de la gran cita del deporte mundial en la que todo deportista anhela estar. Kom logró su pase directo a Tokio en los clasificatorios asiáticos en Amman, Jordania, a principios de 2020. Se consagró campeona mundial amateur ocho veces y logró la primera medalla olímpica – de bronce – de los 51kg en Londres 2012 cuando se incorporó por primera vez a la mujer boxeadora en dicho certamen. Por aquel entonces, se oficializaron solo tres categorías, las cuales se repitieron en Río 2016. Ahora Tokio abre la posibilidad de profundizar en la igualdad de género y la calidad competitiva con la incorporación de dos nuevas categorías: 51kg – 57kg – 60kg – 69kg y 75kg.
Mary Kom tiene 37 años y al parecer, de acuerdo a declaraciones con la prensa, planea colgar los guantes luego de alcanzar la deseada presea olímpica dorada. Las condiciones físicas que ha demostrado en el último mundial de 2019, Ulan Ude, Rusia, indican que la edad no hizo cambios condicionales en esta gran atleta. Incluso ha sido nominada entre los diez referentes olímpicos incorporados por el Comité Olímpico Internacional en lo que se ha dado a llamar El Olympic Boxing Task Force para poder apoyar a los jóvenes en carrera: Jianguan Hu (China); Lukmon Lawal (Nigeria); Julio César La Cruz Peraza (Cuba); Vasyl Lomachenko (Ucrania); Khadija Mardi (Marruecos); Mikaela Mayer (EE. UU.); David Nyika (Nueva Zelanda); Sarah Oorahmoune (Francia) y Shelley Watts (Australia).
Esta mujer que hoy es madre, atleta y fuerte luchadora por la igualdad en la práctica deportiva, ha tenido que derribar muchas murallas en el camino como aspectos conservadores tanto a nivel social como con su padre. Kom logró aprobación a partir de la perseverancia, la convicción y un inmenso amor por el boxeo. Ella resalta que para la juventud es muy importante el apoyo familiar. Con el correr de los años, manifiesta la importancia de confiar en el trabajo realizado a través del tiempo para no dejarse presionar por los resultados, ya que las presiones pueden ser perjudícales: mantener el foco en el objetivo, la pasión, disciplina, dedicación, trabajo duro y confianza, son las cualidades más valorada de un boxeador, en palabras de Mary Kom.